Glosario (Nietzsche)



Actitud apolínea : Actitud vital que consiste en cubrir la realidad con un velo estético creando un mundo ideal de forma y belleza.

Actitud dionisíaca : Actitud vital que consiste en afirmar triunfalmente y abrazar la existencia en toda su oscuridad y horror, dolor y sufrimiento.

Anillo de eternidad : Símbolo con el que Nietzsche se refiere al eterno retorno. Generalmente utiliza esta expresión en latín: Annullus aeternitatis.

Aspecto gnoseológico de la crítica a la metafísica occidental : Crítica a la razón occidental que debe ser eliminada y sustituida por un nuevo concepto de verdad y un nuevo lenguaje.

Aspecto ontológico de la crítica a la metafísica occidental : Poner de relieve el error de la metafísica occidental y afirmar que el mundo del devenir, la vida, es la única realidad existente.

Ateísmo humanista : Se denomina así al ateísmo de todos aquellos que dicen que el concepto de Dios impide el desarrollo del ser humano. El ateísmo de Nietzsche es humanista.

Causa de sí mismo (causa sui): Es una expresión de la filosofía escolástica. Hablando con propiedad, sólo es aplicable a Dios, ya que es el único ser que tiene en sí su propia causa, los demás seres provienen de otros.

Conceptos supremos: La filosofía no ha tratado tradicionalmente de las cosas concretas, sino de conceptos que engloban a una multiplicidad de individuos bajo una “unidad” ilusoria. Las diferencias quedan olvidadas en este modo de pensar. Los “conceptos supremos” son, para Nietzsche, imágenes vacías, abstracciones que ocupan el lugar en el que antes había intuiciones (véase su crítica de los conceptos en favor de la metáfora).

Cristianismo : Manifestación en Occidente de la idea de Dios.

Débiles : Los hombres que no son capaces de vivir la vida tal como es. Son profundamente pesimistas y resentidos contra la vida. Su actitud fundamental es la venganza contra la vida y contra todos aquellos que les recuerden que la única realidad existente es la de la vida, los fuertes.

Decadencia occidental: Rasgo de toda la cultura occidental consistente en la defensa de los valores contrarios a la vida y en la creencia en un mundo objetivo, verdadero, inmutable y racional como fundamento de dichos valores.
Para entender la crítica de Nietzsche a la cultura occidental es preciso fijarse en varios momentos de su historia:
1. Mundo griego hasta el siglo de Pericles (s. V a.C.): ya en su escrito de juventud “El nacimiento de la tragedia”, Nietzsche señala que la época de esplendor del mundo griego era la época anterior a la aparición de la filosofía. La razón por la que Nietzsche hace esta valoración estriba en que cree que en este momento histórico no se ocultan dimensiones fundamentales y trágicas de la vida (lo irracional, el caos, la temporalidad, la enfermedad y la muerte). Las dos grandes construcciones espirituales de la época, el arte trágico y la religión politeísta, junto con la moral de la excelencia y del valor, la moral heroica, no eran contrarias a la vida sino su afirmación, y en el caso del arte y de la religión, su expresión simbólica, expresión que adquiere su máxima densidad en la reivindicación de lo dionisíaco
2. Inicio de la decadencia: Eurípides, Sócrates y Platón. Decimos de algo que es decadente cuando manifiesta una perdida de valor, fuerza o vigor respecto del “tono” vital anterior. Esto es precisamente lo que ocurre con estos autores, pues, según Nietzsche, con ellos comienza la cultura occidental y la decadencia respecto del tono vital anterior; dan lugar al “platonismo”, o creencia en la existencia de un Mundo Verdadero, Objetivo, Bueno, Eterno, Racional, Inmutable, y el desprecio de las categorías de la vida (el cuerpo, la sexualidad, la temporalidad, el cambio, la multiplicidad e individualidad,...). Con ellos comienza la Ciencia y la Metafísica y ellos crean el marco adecuado para la aparición de la Religión y la Moral.
3. Presencia del cristianismo: el cristianismo es totalmente fiel a la filosofía platónica (“platonismo para el pueblo”, dice Nietzsche, filosofía platónica expresada en términos sencillos y accesibles a todo el mundo). Con el cristianismo las ideas que antes estaban presentes en un reducido número de personas, los filósofos, se extienden a todos los hombres. El dualismo ontológico, el dualismo antropológico (una tesis particular en el marco general del dualismo ontológico) pasan a ser de dominio público. El mundo inteligible de Platón pasa a ser lo Infinito o mundo divino, el mundo sensible el mundo terrenal, el alma se opone al cuerpo. Distintas palabras para, en el fondo, las mismas ideas. El cristianismo influirá en la filosofía puesto que, opina Nietzsche, todos los filósofos son en el fondo teólogos.  Con el cristianismo comienza también la moral de los esclavos.
4.     Edad Moderna: con la Edad Moderna comienza la crisis del “platonismo” y del cristianismo. La propia filosofía prepara la “muerte de Dios”: el empirismo, la Ilustración y, ya en el siglo XIX, el materialismo cada vez más pujante muestran el carácter ilusorio de las creencias anteriores.
5.     Actualidadla Edad Contemporánea acentúa la crisis iniciada en la Modernidad, y Nietzsche encuentra en la “muerte de Dios” el fundamento básico de esta crisis. Estamos en un momento crítico: aquello que había servido de orientación a toda la cultura (pero que era pura invención) desaparece del horizonte y el hombre se encuentra desorientado. Tal vez anticipándose a las grandes catástrofes del siglo XX, Nietzsche anuncia inminentes convulsiones sociales y guerras dramáticas, de una intensidad y capacidad destructiva desconocidas. Pero este momento crítico en el que nos encontramos es, a la vez, necesario para la aparición de una nueva forma de estar en el mundo. Es necesario para la aparición de un hombre nuevo (el superhombre) y de una nueva concepción de la vida (la que descansa en la comprensión de la voluntad de poder como la esencia de la realidad).

“Devenido”: “Llegar a ser”. Dios es el único ser no-devenido, ya que siempre ha existido y siempre existirá.

Devenir : La única realidad realmente existente, la vida.

Dionisíaco: Concepción del mundo típica del mundo griego anterior a la aparición de la filosofía. Representa el “espíritu de la tierra” o valores característicos de la vida. El dios griego Dionisos (Baco para los romanos) era el dios de la vida vegetal y del vino, fue muy importante para este pueblo, y a él rindieron culto las bacantes. Nietzsche hace una interpretación de este dios que va más allá de su significado ordinario, considerando que con esta figura mítica los griegos representaban una dimensión fundamental de la existencia, que expresaron en la tragedia y que quedó relegado en la cultura occidental: la vida en sus aspectos oscuros, instintivos, irracionales, biológicos. Aunque Nietzsche explica este término en su obra juvenil “El nacimiento de la tragedia”, nunca lo abandonó, y lo podemos utilizar como metáfora de lo que más tarde llamó “voluntad de poder”.

Dios : Junto con la razón otro de los grandes pilares de Occidente. La objeción mayor contra la existencia. Dios es la fórmula de toda calumnia contra el mundo de la vida y de toda mentira respecto al inexistente más allá.

Egipticismo: Es la concepción estática, la petrificación y la negación del tiempo. Ésta es la crítica que hace a los filósofos dogmáticos, idealistas platónicos, que consideran la realidad como algo ya consumado, sin tener en cuenta que las cosas se están creando y destruyendo. Esta ceguera les lleva a afirmar que sólo es lo que está quieto y no deviene. Lo que deviene no es.

“Ens realissimum”: Dios es el único ser perfecto y necesario (existe y es imposible su no existencia), frente al resto de los seres que son contingentes (son pero podrían no ser).

Eterno retorno : La vida se repetirá tal como la hemos vivido y la vivimos. Repetición eternamente cíclica y en la que no habrá novedad alguna. Todo, absolutamente todo, hasta los detalles más nimios, volverán en el mismo lugar y en el mismo tiempo.

Fuertes : Nieztsche llama así a aquellos hombres que son capaces de afirmar la vida y de vivirla tal como es.

Genio creador : En El origen de la tragedia el hombre que es capaz de afirmar la vida mediante las actitudes dionisíaco-apolíneas.

Gramática: La razón nos lleva a utilizar un lenguaje, donde las palabras pierden su carácter metafórico intentando suplantar a las cosas, y nos vemos atrapados por su lógica, sus reglas, su gramática, a ver las cosas como las representa el lenguaje. Acabamos viendo causas, sustancias, sujetos, etc., y añadimos ser a entidades que sólo son palabras. Mientras que el lenguaje esté teñido de las categorías de la razón, existirán instrumentos para engañarnos respecto a la realidad.

Hombre terrestre : Último hombre.

Idiosincrasia: Lo utiliza con una intención peyorativa, tiene sus significado habitual de peculiaridad pero remarcando lo que hay en ella de idiota. Se trata del carácter propio, de lo que identifica y lo distingue de los demás.

Lenguaje : El resultado de la razón y su abogado permanente. Hay que luchar contra el lenguaje porque la vida no se puede conceptualizar, encerrar en palabras, comunicar. Mientras no destruyamos el lenguaje, no habremos acabado con Occidente.

Metáfora : El lenguaje debe ser entendido no como palabras que expresan conceptos sino como metáfora en la que se integre la diversidad abierta, contradictoria y continuamente variable de la vida.

Monótono-teísmo: Expresión irónica para referirse a la concepción estática cristiana, que es un tedioso y monótono teísmo.

Moral de esclavos : Moral de la razón y del cristianismo. Mediante sus valores, que llaman a la igualdad fraterna y a la compasión, oculta un profundo resentimiento contra la vida. Es la moral de aquellos que no son capaces de vivir la vida en todo su dolor y crudeza y, por ello, falsean la realidad y mediante la creación de valores morales sujetan a aquellos que sí pueden vivir la vida tal como es, los fuertes.

Moral de los débiles : Moral del resentimiento. Moral de los esclavos.

Moral de los señores : Moral de los fuertes. Propuesta moral de Nietzsche según la cual hay que ir más allá del bien y del mal establecido por Occidente transmutando los valores y afirmando que el único valor es el de la vida y que la única actitud válida para afrontarla es la voluntad de poder.

Moral del resentimiento : Moral de los débiles. Moral de los esclavos.

Muerte de Dios : Eliminación del concepto de Dios que imposibilita el pleno desarrollo de los hombres porque no les deja reconocer que la vida es la única realidad existente y que deben aceptarla y afirmarla viviéndola desde el profundo torrente del instinto.

Mundo ultraterreno de esencias : Error de la metafísica occidental. Considerar que los valores de las cosas no están en ellas mismas (la vida) sino en un mundo más allá de éste donde residen las esencias de las cosas, lo que las cosas son auténticamente.

“Mundo verdadero”: Es una ficción, es el resultado de las lucubraciones alejadas de la realidad que lleva a cabo la metafísica. Nietzsche lleva a cabo en el texto una reivindicación de los sentidos, el único mundo existente es el que nos muestran los sentidos. El mundo “verdadero”de la razón es una mentira.

Nihilismo: Actitud vital y filosófica que niega todo valor a la existencia, o que hace girar la existencia alrededor de algo inexistente. La idea nietzscheana del nihilismo es compleja:
1. Nihilismo como decadencia vital: para Nietzsche toda cultura que crea en la existencia de una realidad absoluta, realidad en la que se sitúan los valores objetivos de la Verdad y el Bien, es una cultura nihilista. En la medida en que el cristianismo concentra esta realidad absoluta en la figura de Dios, a la que le opone el mundo de las cosas naturales, y en la medida en que, según nuestro autor, dicho mundo “superior” es una pura nada, la cultura cristiana, y en definitiva toda la cultura occidental, es nihilista pues dirige toda su pasión y esperanzas a algo inexistente (el Dios cristiano, el Mundo Ideal y Racional de los filósofos), despreciando de modo indirecto la única realidad existente, la realidad del mundo que se ofrece a los sentidos, la realidad de la vida. En “Así habló Zaratustra” representa Nietzsche este modo de mostrarse el espíritu con la figura del camello, símbolo de la aceptación  resignada  de las mayores cargas.
2. Nihilismo activo: es también nihilista la filosofía que intenta mostrar cómo los valores dominantes son una pura nada, una invención; la filosofía nietzscheana es nihilista en este sentido pues propone la destrucción completa de todos los valoresvigentes y su sustitución por otros radicalmente nuevos (propone la “transmutación de todos los valores”). Este nihilismo es una fase necesaria para la aparición de un nuevo momento en la historia de la cultura, para el reencuentro con el “sentido de la tierra”, la aparición de una nueva moral y de un nuevo hombre, el superhombre. En “Así habló Zaratustra” representa esta figura del espíritu con la metáfora del león (por su agresividad, su capacidad destructiva).
3. Nihilismo pasivo: es una de las consecuencias de la “muerte de Dios”, aparece por  la consciencia del carácter radicalmente infundado de la creencia en lo sobrenatural, de la creencia religiosa en el mundo del espíritu. Durante siglos nuestra cultura ha considerado que los valores descansan en algo trascendente, que existe un ámbito objetivo gracias al cual la existencia tiene sentido. La vida tiene un sentido porque algo exterior a ella se lo da. Con la muerte de Dios sobreviene la crisis del sentido y el convencimiento de que la existencia es absolutamente insostenible, vacía, carente de sentido. El “nihista pasivo” no cree en ningún valor, puesto que considera que todo valor es posible sólo si Dios existe, y Dios no existe; termina en la desesperación, la inacción, la renuncia al deseo, el suicidio. En este momento crítico encontramos el nihilismo en la desesperación de los que consideran que nada tiene sentido ni valor por no existir aquello que debería ser el fundamento de todo sentido y valor,  Dios. Aquél que dijese que si Dios no existe todo está permitido, aquél que desesperase de la vida y se levantase en contra de ella por considerar que ésta solo puede tener su fundamento en algo ajeno de ella y que dicho fundamento no existe, ese sería también nihilista.

Nihilismo activo : Actitud de reconocimiento de que la realidad no tiene un sentido más allá de sí misma, de la vida, y afirmación de ésta mediante la voluntad de poder.

Nihilismo pasivo : Actitud pesimista que, aunque reconoce que la realidad no tiene un sentido más allá de sí misma, echa de menos un sentido último, trascendente. Para Nietzsche es una actitud negadora de la vida y su máximo representante sería Schopenhauer.

Ontología dinámica : Nombre con el que se puede designar a la doctrina del ser de Nietzsche. El único ser existente es la vida, y ésta es continuo devenir, cambio, movimiento.

Perspectivismo: Teoría contraria al objetivismo. Afirma que toda tesis relativa al mundo, todo conocimiento, está influida por las peculiaridades del sujeto cognoscente.Varias décadas antes que Ortega y Gasset, Nietzsche defiende el perspectivismo: toda representación del mundo es representación que se hace un sujeto; la idea de que podemos prescindir de la situación vital del sujeto, de sus rasgos físicos, psicológicos, históricos o biográficos, para alcanzar un conocimiento del mundo tal y como éste pueda ser (la idea de la posibilidad de un conocimiento objetivo) es un absurdo. Nietzsche considera imposible el conocimiento de la realidad en sí misma, pues toda afirmación, toda creencia, toda teoría del mundo depende del punto de vista de la persona que la ha creado. Más aún,todo ser dotado de algún grado de conocimiento, de alguna capacidad para representarse el mundo (por ejemplo porque pueda percibirlo de algún modo), es tan buen testigo del mundo como nosotros, los seres humanos. Nuestro punto de vista no es mejor para una correcta descripción de la realidad que el de otras especies animales (sencillamente porque no hay ninguna descripción mejor ni peor, todas valen lo mismo). “Abstraer al sujeto equivale a pretender representarse el mundo sin sujeto; es una contradicción: ¡representar sin representación! Quizá existen cien mil representaciones subjetivas. Si se abstrae la nuestra humana, queda entonces la de la hormiga. y si se abstrae toda vida menos la hormiga, ¿de veras ésta sería el hilo del que pendería la existencia? Sí, el valor de la existencia pende del hilo representado por los entes dotados de sensibilidad” (“La inocencia del devenir”).
      No existe ningún dato, ninguna experiencia, no contaminado por un punto de vista, por una interpretación. “La característica del mundo del devenir es la de ser informulable, falso, contradictorio. El conocimiento y el devenir se excluyen. Así pues, no existen hechos que nos sean dados inmediatamente; sólo manejamosinterpretaciones”. No es posible un “criterio de verdad” (por ejemplo el famoso criterio cartesiano de la claridad y la distinción), no existen los datos puros a partir de los cuales podamos construir un saber objetivoY no podemos encontrar datos o verdades primeras ni en nuestro conocimiento del mundo exterior, el mundo que llamamos físico, ni tampoco en el mundo interior. La posición de Nietzsche es tan radicalmente contraria a la posibilidad de encontrar una verdad absoluta que ni siquiera cree posible lo que podría parecer la verdad más verdadera, el cogito cartesiano: tampoco el mundo de la mente se nos muestra en su pureza, nuestro conocimiento de la mente propia está tan influido por prejuicios como lo está el conocimiento del mundo exterior. “Los hechos de conciencia no son más inmediatos que los hechos externos, están construidos exactamente igual”. El perspectivismo nietzscheano parece ser una forma de relativismo y subjetivismo.
PlatonismoNietzsche llama platonismo a toda teoría para la que la realidad está escindida en dos mundos: un mundo verdadero, dado a la razón, inmutable y objetivo, y un mundo aparente, dado a los sentidos, cambiante y subjetivo. El pensamiento, la filosofía y la religión son una forma de platonismo pues defienden la misma concepción de la realidad, aunque con palabras distintas: mundo de las Ideas y mundo sensible en Platón, mundo divino y mundo terrenal en el Cristianismo, númeno o cosa en sí y fenómeno en Kant.
Realidad primordial : Para Nietzsche la vida.

Resentimiento: Vivencia de los “esclavos”, de los débiles, consistente en el recelo, el miedo a la corporeidad, la vida y los valores de la tierra. Es el sentimiento que les mueve a inventarse un mundo objetivo y bueno, y la tabla de valores tradicionales característica del cristianismo y de toda la cultura occidental.

Sentido de la tierra : Expresión con la que Nietzsche designa a la vida.
Superhombre : El hombre más allá del hombre occidental. (En alemán, Übermensch). Hombre que será capaz de reconocer que la única realidad es la vida y que ésta hay que afirmarla en toda su crudeza, mediante la voluntad de poder, alegrándose porque retorne eternamente de igual forma. Hombre nuevo que aparece tras la “muerte de Dios”. Nietzsche lo concibe como el individuo fiel a los valores de la vida, al “sentido de la tierra”.
Transmutación De Los Valores: Momento necesario para el final de la moral tradicional (o moral de esclavos) y la aparición del superhombre.
      Nietzsche no propone vivir sin valores (llega a considerar incluso que esto es imposible); propone más bien invertir la tabla de valores: superar la moral occidental, moral de renuncia y resentimiento hacia la vida, mediante una nueva tabla en la que estén situados los valores que supongan un sí radical a la vida.
      Con una expresión excesivamente retórica Nietzsche llama “rebelión de los esclavos” a la situación que se crea con el triunfo del cristianismo: el cristianismo y el judaísmo sustituyen la moral aristocrática (que Nietzsche cree encontrar en el mundo griego antiguo) por la moral de los esclavos. Con el cristianismo prospera la moral de los débiles, de los que quieren huir del rigor de la vida inventándose un mundo objetivo, de reposo, de justicia. Nietzsche nos dice que los judíos invierten el código moral aristócrata.

Último hombre : También llamado hombre terrestre. Hombre que es incapaz de superar la cultura occidental y de vivir la afirmación de la vida mediante las actitudes dionisíacas propias de la voluntad de poder. El último hombre sólo puede criticar a Occidente y profetizar la venida de un nuevo hombre, más allá del hombre occidental, que pueda vivir como la vida exige. Nietzsche se caracteriza a sí mismo como último hombre mediante la máscara de Zaratustra.

Valor: Se trata del punto de vista con el que la vida se afirma a sí misma. No hay actividad vital, desde la propia de las plantas a los seres superiores, que no consista en establecer, erigir, asegurar, sostener o, en el peor de los casos, derribar valores. Vivir es valorar desde el protozoo o la ameba hasta el ser humano. El sentido más propiamente nietzscheano de lo que entiende por valor tiene que ver con el aumento o la disminución de la actividad vital.

Verdad : Para Nietzsche es una gran mentira. Un conjunto de metáforas, generalizaciones e ilusiones que el uso y la costumbre han impuesto y que hacen que los hombres occidentales vivan en rebaño.

Vida: La vida es uno de los conceptos claves del pensamiento de Nietzsche. Vida, tomando como modelo la humana, y extendiendo el modelo a toda la escala de los seres naturales, es aumento o disminución del poder. Vida es así voluntad de querer, de poder, de crecer y afianzarse en los procesos propios de cada especie de seres. Vivir sería siempre querer vivir más, más intensa y profundamente. La vida no tiene que ver tanto con la biografía como con la biología, Tiene más que ver con cómo la vida vive en nosotros, que con cómo la vivimos individualmente. Porque, de alguna manera, la vida vive en nosotros, atraviesa nuestra biografía, se desparrama más allá de un individuo que habita un espacio y un tiempo determinados, para ser vida común, colectiva, genérica con todo ser natural, compartida en un ámbito cósmico.

Vitalismo: Se llama vitalismo a toda teoría filosófica para la que la vida es irreductible a cualquier categoría extraña a ella misma.
El vitalismo en la filosofía: en la segunda mitad del siglo XIX y primera del XX encontramos importantes filósofos que desarrollan toda su filosofía a partir de la reflexión relativa a la vida. Dentro de esta línea del vitalismo se suelen distinguir también diversas corrientes en función de su concepto de vida. Es habitual señalar al menos dos formas de entender la vida: la vida en el sentido biológico y la vida en el sentido biográfico e histórico:
  • la vida en el sentido biológico: este concepto subraya el papel del cuerpo, los instintos, lo irracional, la naturaleza, la fuerza y la lucha por la subsistencia. El vitalismo de Nietzsche se incluye en este grupo;
  •  pero también podemos referirnos a la vida como conjunto de experiencias humanas dadas en el tiempo, tanto en su dimensión personal o biográfico como en su dimensión social o histórica. La filosofía de Ortega y Gasset se incluye en este grupo. Ortega utilizará las categorías de la vida entendida de este modo (vivencia, teoría de las generaciones, perspectiva) para el desarrollo de su filosofía.
      El vitalismo en filosofía se presenta como una doctrina contraria al racionalismo. Los conceptos más importantes alrededor de los que gira la filosofía vitalista son: temporalidad, historia, vivencia, instintos, irracionalidad, corporeidad, subjetividad, perspectiva, valor de lo individual, cambio, enfermedad, muerte, finitud... 
      Se puede entender la totalidad de la filosofía de Nietzsche como el intento más radical de hacer de la vida lo Absoluto. La vida no tiene un fundamento exterior a ella, tiene valor en sí misma. Y la vida entendida fundamentalmente en su dimensión biológica, instintiva, irracional. La vida como creación y destrucción, como ámbito de la alegría y el dolor. Por esta razón, Nietzsche creyó posible medir el valor de la metafísica, la teoría del conocimiento y la ética a partir de su oposición o afirmación respecto de la vida.

Voluntad de poder : Afirmación de la vida mediante la voluntad. La voluntad quiere la vida tal como fue, tal como es, tal como será. Dicha voluntad es voluntad de poder, de dominio, de control, es voluntad de ser señor. Principio básico de la realidad a partir del cual se desarrollan todos los seres. Es la fuerza primordial que busca mantenerse en el ser, y ser aún más.

3 comentarios: